VIAJE
RELÁMPAGO
DIA 1
… por esas cosas de la vida, hube de
volver sobre mis pasos… volver a enfrentarme con el pasado, un pasado que trajo
abundante lluvia a mi corazón… mientras esperábamos a que el pájaro de acero se
dignara volver su vista hacia nosotras sentía una emoción lacerante… estaba ahí
con mi hermana, después de unos 23 años volvíamos a hacer un viaje juntas, era
la primera llamada… pensé en cómo habían pasado los años, cuántos años desde
aquél viaje a Mazatlán cuándo estábamos solteras y éramos unas mozuelas…
platicamos de muchas cosas y bueno te das cuenta que de las hermanas nunca
dejas de ser hermana, hay lazos que jamás se rompen, eso era seguro… abordamos
al pájaro de acero que nos llevaría al pasado, un pasado más presente que
nunca, el abuelo se había ido… sentía un gran desasosiego, nos encontraríamos
con nuestra otra hermana a la que hacía dos años que no veíamos y eso nos
emocionaba, conoceríamos su casa y volveríamos a ver a su pequeña y a su
compañero de viaje… el pensar en ello hacía que la lluvia que caía sobre mi
corazón amainara… por la otra parte, habríamos de visitar a la abuela, un lazo
invisible que nos une a mamá… si el lazo con las hermanas es fuerte con el de
la madre es eterno, va más allá de la vida, más allá de la muerte, y la abuela
era parte de ese lazo, a través de ella mamá vive, todo en ella me la
recuerda… el abuelo había ido a reunirse
con sus antepasados y no habíamos podido decirle adiós, ahora era el momento…
él ya no estaba pero estoy segura de que se habría puesto contento de saber que
visitamos a la abuela y más feliz se hubiera puesto de haber sabido que escribí
algo para él llamándole Abuelo… así era él, hacía mucha fiesta cuando me
escuchaba decirle abuelo… pero como te decía él ya no está más y no se dará
cuenta de si fuimos o no, pero ella si y aún contamos con sus bendiciones, tal
y como mamá lo hacía… después de una hora y piquito de estar muy cerca de
Diosito el gran pájaro de acero tocó tierra… descendimos y la lluvia en mi
corazón seguía… el aeropuerto de Cd. Juárez es pequeño a comparación del que
tenemos en el ombligo del mundo, así es que sin más ni más recogimos el
equipaje que habíamos etiquetado… su identificación… ¿le vale mi credencial de
elector?... si… pásele… y pasamos, habíamos llegado a la frontera, acá las
cosas se manejan de manera distinta, porque ha de saber usté que en mi México
podemos ir y venir por donde queramos sin tener que sacar ningún papel, claro a
menos que haya algún retén en carretera, en los puertos o en las fronteras, de
ahí en más gozamos de completa libertad… seguimos el pasillo que nos conducía a
la salida… ¿habrán llegado?... quién sabe, llegamos antes de tiempo… bueno pues
a buscar un lugar para esperarla… y de pronto vimos a la pequeña estrellita
corriendo hacia nosotras con sus bracitos abiertos de par en par… ¡tías,
tías!... ¡mira nomás que grandotota estás!!!... la pequeña estrellita estaba
convertida en una niña de cinco años, con su pelito de sirenita y sus ojitos
llenos de luz… nos abrazamos todas muy contentas, ya sabes, haciendo bolita…
unas a otras nos preguntábamos… ¿cómo les fue? ¿no batallaron?... ¿a qué hora
llegaste?... ¿y tu marido?... en fin, no dábamos abasto para tanta pregunta…
bueno vámonos, si vámonos… aquí hay que pagar el estacionamiento antes y
tenemos 15 minutos para salir, si no, nos vuelven a cobrar… ¡joder!...
rápidamente enfilamos hacia donde la Cuki había dejado el carro… era un
estacionamiento pequeño, te vuelvo a decir, como el ombligo del mundo, no hay
dos…
habíamos acordado no decirle a la Abue
que llegaríamos, queríamos que fuera sorpresa, un día antes había cumplido
años… mejor avísenle cuando estén cerca, no va a ser que con la sorpresa… me
decía una compañera de trullo sin terminar la frase… si, es cierto, no vaya a
ser que queriéndole dar una sorpresa, salgamos sorprendidas ¿verdad?... pero
no, no lo hicimos aún y con la advertencia quisimos jugárnosla, pensamos que a
lo mejor de vernos, si estaba triste, se animaba… la lic había hecho planes y
tenía el itinerario que seguiríamos en la visita relámpago… bueno este es el
plan, vamos, vemos a la Abue y luego nos vamos a cenar… ¿es ese el Puente Al
Revés?... no, no es ese, es otro que está más para allá, pero igualito a este,
¿qué te imaginas que es el Puente al Revés?... me preguntaba divertida mi
hermana… no pus pienso que en lugar de estar pa'rriba está pa'bajo o algo por
el estilo… no, le llaman así porque se dice que este puente estaba planeado
ponerlo de norte a sur y al final vino saliendo de oriente a poniente… nos
reímos con la explicación… ah, como es la raza ¿verdá? De toditito se dá
cuenta… la pequeña estrellita había puesto sol en mi corazón era como si
hubiese puesto un arcoiris multicolor, pero la lluvia seguía… llovía en mi
corazón… comencé a ver el camino y aunque no reconocí totalmente inmediatamente
vinieron a mi mente los recuerdos de aquella vez que habíamos llevado a mamá y
que llegamos remolcados a altas horas de la noche… ¿cómo no iba a llover en el
corazón con todos esos recuerdos agolpados en mi mente?... llegamos a la Blas
Pascal y ahí no nada más me acordé de mamá, de esa última vez, sino de también
del Abuelo que con su voz de trueno y sus caminados a mil por hora andaba de un
lado pal otro esa vez de la remolcada… traíamos al vecindario en vilo… sentí un
vacío conforme nos acercábamos a la casita aquella… a ver si las reconoce…
decía la Cuki, nosotras nos reíamos… ay, tiene rezo… ¡joder!... toc, toc, toc…
abrió la puerta una ancianita de carita agradable que reconoció de rapidín a la
Cuki… ¡buenas tardes!... buenas tardes, dijo la Abue con cara de pocos amigos,
mientras el hijo de la abuela que pasó a ser hermano de mi madre y por tanto
nuestro tío, se hacía presente… me paré frente a ella… seguía en la luna… ¿no
me reconoce?... le dije riéndome… ¡ay, si eres tú! No te reconocía… me dijo
mientras se paraba y yo pensaba ya me dí cuenta… mire abue también vino la gorda… bueno a
estas alturas la exgorda… se levantó y nos abrazó con alegría, le había dado
gusto vernos… no esperaba que vinieran… ¿a que hora llegaron?... venimos del
aeropuerto… vamos a rezar el rosario…
decía la abuela con sus ojitos llenos de chispa… mientras hacía las
presentaciones de rigor con las ancianitas que la acompañaban… son mis nietas,
las hijas de Coco, vienen del ombligo del mundo… y las viejecitas como buenas
urracas decían al mismo tiempo… ay, que lejos… ay, si son igualitas a Coquito…
¿conocían a mi mamá?... uy si, cómo no… ay, si como se parecen… tú, tú estás
igualita a Coquito… me decía una de ellas… ay ‘ñora pus dicen que la que se parece
mucho a ella es la exgorda… mire usté por donde me fui a enterar que me parecía
a mamá, el mundo entero dice que soy la cara de mi padre… no, no, tú si estás
igualitita a ella, ella también se parece, pero no tú, tú estás igualita…
volvía decir emocionada… me cae que decía eso porque a mi me había tocao bola
negra en eso del rosario y apolingué rezándolo completitito sin pararme ni un
momentitito… no si eso del rezo le da a uno ritihartos puntos con las
ancianitas ¿verdá?... mientras rezaba de vez en vez volteaba a ver la foto del
abuelo, estaba ahí con su traje y su corbata de moñito, su pelo bien peinao y
su mirada juguetona, la foto había captado su espíritu, así era él, alegre,
parlanchín y muy catrín… luego cuando veía las cositas de la casa de la
abuelita recordaba a mamá, de esa última vez que habíamos estado ahí, hacía más
de 10 años y en mi corazón volvía a llover…terminado el rezo en honor al
Abuelito nos fuimos a tomar un café, bueno las señoras, nosotras habíamos
comido en el vuelo y por si fuera poco teníamos planes… así es que solo las
acompañamos… después de un buen llegó la hora de despedirnos… .¿cómo, no se van
a quedar aquí?... errr… tragamos saliva… esque la Cuki ya nos tiene todo listo
en su casa Abue… ¿ya las vas a acaparar?... le dijo la Abue en tono de reclamo…
acuérdese que cuando venía mamá ella se quedaba aquí con usté y yo no me
enojaba, ahora me toca a mí… le dijo la Cuki abrazándola… y nos acomodamos… si
Abue, mañana volvemos a venir y rezamos el Rosario con usté y cenamos también…
le dijimos conciliadoramente… ustedes vinieron a todo menos a rezar el rosario
y fue lo que les tocó ¿verdad?... dijo la abuela, chingao, esta ‘ñora no ha
perdido el don del regaño… nos carcajeamos y así fue como nos despedimos…
llegamos a comprar la cena era un restaurante de esos en donde venden carne
asada, habíamos decidido cenar en casa, en familia… nomás llegandito nos
pudimos dar cuenta de la diferencia que hay entre la gente de la frontera y la
gente de por estos lares… la mayoría va de paso por esas ciudades, supongo que
llevan la esperanza de pasar pal otro lado y el por eso de las diferencias… a
la pequeña estrellita le urgía que llegásemos a su casa… voy a enseñarles mis
juguetes… les voy a compartir mi cuarto.. decía con su carita llena de luz, de
esa luz inocente que los pequeños tienen y que los hace tan maravillosos…
llegamos a la casa de la Cuki y cenamos en familia, estábamos contentos, yo me
sentía feliz por todo lo que había encontrado en esa ciudad a la que nunca
habría vuelto si no fuera porque ahí está mi hermana y la abuela… después de
terminada la cena, platicamos largo rato en la habitación que nos daría cobijo
en esa noche… la estrellita estaba feliz de que sus tías estuvieran ahí con
ella, no se cansaba de enseñarnos sus juguetitos que para mi sorpresa muchos
eran minis, así es que era mi mero mole y no me cansaba de verlos… ¡yo me
duermo con mis tías!!!... y ahí se quedó dormidita con su carita de angelito y
su pelo de sirenita… nosotras seguíamos platicando… ¿vamos al Paso mañana?...
.!si, si!... entonces hay que levantarnos temprano para agarrarle tiempo al
tiempo… ¡hecho!!!... buenas noches… y torcí el pico…
DIA 2
… durante la noche había llovido y el
frío era congelante a pesar de la calefa, como le decía la estrellita a la
calefacción… nos amaneció temprano, nos acicalamos, desayunamos y esperamos a
que la Cuki regresara de la escuela de la pequeña estrellita, que a pesar del
grado de temperatura, ella había ido a clases, allá en esa ciudad olvidada el
trajinar del día no se detiene por el clima, todo sigue su curso…. Así es que
con dólares en mano salimos rumbo al Paso, Texas, el compañero de viaje de la
Cuki que pasó a ser nuestro cuñao nos llevaría hasta el puente… prepárense
porque vamos a pasar el puente caminando… no te preocupes venimos dispuestas a
todo… mientras avanzábamos en las carretera que nos llevaría al Paso, Tx. Veía
a través del cristal y divisaba los cerros totalmente nevados… ¡mira están
nevados!... estaban a una distancia que bien podía tocarlos con la mano… ¡que
bonito se vé todo aquello!... eso ya es el Paso, TX… ¿cómo qué no es México?...
no, es el Paso… ¡joder! Porqué nomás allá se vé todo bonito… me preguntaba pa'
mis adentros… llegamos al puente y comenzamos a caminar… el frío traspasaba mi
saco cubretodo, era como si trajera un simple pulóver, en pocas palabras mi
saco cubretodo allá valió madre… sentía cristalizadas mis orejas y un oído
comenzó a doler por el frío, pero ni vaya usté a creer que aminoraba el paso,
no ‘iñor le metía más caña a la caminata, digo habíamos de calentar motores,
íbamos al Paso, TX. No íbamos a hacer quedar mal a los paisanos ¿verdá? Mucho
menos a los regios ¡joder! Y mi bocota que el día anterior había dicho que ni
hacía frío… tuve que tragarme una por una mis palabras, el frío de aquellos
lares estaba cabrón... si les preguntan, ustedes digan que van de compras… ¿por
qué?... porque ustedes se ven distintas a la gente de aquí y las van a
desconocer… ¡joder! No le atina uno, si vas tirando balas porque vas tirando
balas y si vas chimoltrufia, porque vas chimoltrufia… en fin, no había nada que
temer, llevábamos billetes verdes suficientes pa'comprar medio Paso ó Paso y
medio ¡who knows!… no hubo necesidad de hacer alarde de la dolariza, pasamos
sin problemas, no si te digo, de que nos vemos gente de bien, pus ni dudarlo…
¿esto es el Paso?... ¡pero si parece un rancho medio grande!... ¡joder!... en
la vida había yo cruzado el puente… se veía jodidona la cosa… había mucha
gente, todos en lo suyo y si la Cuki tenía razón, había diferencia pensé que la
mayoría de la gente que pasaba era porque trabajaban allá y no iban de visita
como nosotras, digo de turistas nanay… comenzamos a ver tiendecitas de cositas
por todos lados, nuestro mero mole, comenzamos el peregrinaje y pronto se nos
olvidó el frío congelante que se sentía… visitamos cientos de tiendecitas,
todas tenían lo mismo pero queríamos disfrutar de ese día en el Paso, Tx.
Además teníamos más de 23 años de no salir juntas… ¿quién podría detenernos?...
mi amado Malagueño y mi adorado Aguilucho a mil y piquito kilómetros de
distancia, los críos de la gorda y su compañero de viaje también, el Paso, Tx
era pa'nosotras solitas no liaunque que pareciera un rancho grande… tomamos
algunas fotos digo había que estar a tono, al final de la avenida se divisaban
grandes edificios, ahí estaba la West Fargo o algo por el estilo, si, esa que
era muy famosa en las pelis de vaqueros… entre fotos y tiendecitas, y sin saber
cómo ni cuando llegó la hora en que la Cuki debería de recoger a la pequeña
estrellita… ¿a qué hora las recojo?... a las 5:45, ahí a la salida del puente…
mmm, estás segura?... si… bueno, nomás tomen en cuenta de que aquí a las 6 ya
es de noche… ah, caray, no me había percatao de eso… ‘ntons a las 5… bueno a
las 5 ahí en el puente… y nos despedimos… nosotras le seguimos de tienda en
tienda, no hubo una sola que no viéramos y entráramos… la dolariza empezó a
mermar el bolsillo… negros nubarrones presagiaban tormenta y el frío congelante
amenazaba por cristalizarnos por completo pero ni así aflojábamos el paso al
contrario me cae que ese frío nos hacía que buscáramos tiendas y más tiendas…
ya muy tarde decidimos pasarnos a comer algo y también pa' usar los toiletes
que pa'ese entonces era urgente… ahí en esas calles de Dios no podías encontrar
ni un solo tuale… si mi querida amiga en los Yunaired también pasa lo mismo que
en nuestro amado México, ni ‘onde ponerlas y yo con la clortalidona en mi
sangre, así es que ya sabrás de lo que escribo… encontramos el área de
restaurantitos de comida rápida y quisimos ir a visitar también al Coronel
Sanders no fuera a ser que se sintiera y mire usté sorpresa que me llevé…
salimos comiendo los méndigos burritos de aquella inolvidable vez que
regresábamos de Luisiana y que nos hicieron el regreso de cuadritos… quien
diría, quién diría que un día volvería a comerlos… después de comer y vaciar
las vejigas volvimos al ataque, ahora cargadas de bolsas y más bolsas, todas en
un carrito llevado ex profeso… oye, y ‘ora pa'pasar el puente ¿cómo le hacemos?,
me cai que nos van a detener… acomodamos todo de la mejor forma posible y
resultó que ya no era un carrito, eran dos… ¡joder!... me cae que nos van a
bajar del macho, más vale ir preparadas… casi llegaba la hora de regresarnos y
enfilamos hacia el puente, el mismísimo que cruza el Río Bravo y divide a
nuestro amado México de los Yunaired… a esa hora, igual que en la mañana venía
mucha gente, supusimos que eran los compatriotas que tienen que trabajar del
otro lao y que día con día se avientan el jale de pasar el puente… de ida
pagamos una lana por pasarlo y de regreso lo mismo pero en dolarucos… veníamos
muy quitadas de la pena caminando y caminando porque ha de saber usté que el
dichoso puente es como de un kilómetro, para nuestra buena fortuna el aire ya no
estaba tan fuerte y eso hacía que el frío no se sintiera tan inclemente como
esa mañana… ahí está la aduana a ver cómo nos vá… supongo que me ví aplomada
porque pasé sin ningún problema, mi carrito no levantó sospechas, de buenas, de
otra forma tendría que haber pagao derechos por excederme en 4 dólares las
compras del día que deben ser de máximo $50 dolarucos por piocha… dí tres pasos
y volté la vista pa'ver ‘onde había quedao la exgorda y ahí estaba
apalabrándose con el aduanal y comenzando a sacar las cosas del carrito… me reí
pa'mis adentros con muchas ganas… el carrito lucía aparatoso con tanta bolsa
pero nomás era el volumen de las almohaditas de un dólar que habíamos comprado
al mayoreo… ja ja ja… buen chasco, si creiba que se desayunaba con nosotras,
pus nomás no se pudo… no nos habíamos salido de la cuota estipulada… no si
semos rete respetuosos, además que todo lo que había en el Paso, Tx. lo
podíamos encontrar aquí en el Ombligo del Mundo, así es que ni caso que tenía
cargar desde allá… lo bonito de haber ido fue darnos gusto viendo aquí y allá y
disfrutar de la compañía… finalmente la exgorda pasó con todo y carrito y
llegamos a la Estación de Tragafuegos en donde habíamos quedado de vernos…
nomás llegandito al lao Mexicano el corazón se estrujó, había cientos de
personas ahí paradas esperando a los que regresaban de allá… la vida que nos
tocó vivir es una putada pensaba al tiempo que caminaba… a los pocos minutos
pasó la Cuki con la estrellita a recogernos, era hora de rezar el rosario…
¡joder!... llegamos a la casa de la abuelita y volvimos a integrarnos al
Rosario, volví a sentir que en mi corazón llovía abundantemente al ver cada
cosa de esa casa, recordaba a mamá en esa transformación que se apoderaba de
ella cuando estaba en la casa de la abuela y esbozaba una sonrisa mientras
pensaba… ay mamá, si no se hubiera ido tan pronto, me cai que también nosotras
abríamos tenido esa metamorfosis… el rezo terminó y volví a mi realidad…
pasamos a cenar, la abuela se había esmerado y había mandado traer unos tamales
deli deli… ay abue pa'que se molestaba… no mi’ja estas ‘ñoras han venido los 9
días al rezar… ja ja ja… miré usté y yo que creiba que la tamaliza era por
nosotras… ja ja ja… supongo que así era pero la Abue con ese corazón de hierro
que se carga y que la ha hecho fuerte para enfrentar las envestidas de la vida
que le tocó vivir, pus nomás no podía darse el lujo de reconocer que eran
pa'nosotras, no si la ‘ñora es de armas tomar… había llegado la hora de decir
adiós…¿qué van a hacer mañana?... mañana nos vamos, pero antes pasamos de
rápido a despedirnos… ¿no van a hacer nada?... mmm no… ¿por qué?... tu tía me
invitó a comer por mi santo y me dijo que les dijera a ustedes también, ¿cómo
ven?... nomás de verle sus ojitos llenos de esperanza no pude decir que no,
sabes, los ojos lo dicen todo, tu boca podrá hablar pero los ojos son los que
mandan y ella con su mirada me decía que fuéramos… si, si vamos… y cerramos la
cita, al día siguiente a las 12:30… el pájaro de acero partiría a las 5:40 con
o sin nosotros así es que tendríamos que acatar el reglamento… la prima que
hace años fue sobrina y que ahora es mamá nos llevó a casa de la Cuki… esa
noche nos amaneció en la plática, después de todo con la comida habíamos dicho
adiós a la esperanza de volver a El Paso, TX. quialcabo que ni dólares
traibamos ya… la pequeña estrellita esa noche volvió a su cama y se quedó
dormidita tal vez soñando con un viaje a Disneyland gracias a los folletos que
en mala hora se me había ocurrido llevarle, el paquetón que les dejé a sus
padres… tía, ya tengo planes… decía con su carita sonriente… ¿qué planes
tienes?... que vamos a ir a Disney todos juntos… tú, tú primero, luego mi tía
la exgorda, después yo, luego mis primitos y al final mis papitos para que
vigilen que nadie se salga de la línea… decía la pequeña estrellita con sus
ojitos llenos de luz y una gran sonrisa… mira tía, primero vamos a ir aquí y
después acá, y luego acá…¿qué habrá aquí?... seguía diciendo mientras señalaba
con su dedito de pianista el mapa… si, mi pequeña estrellita, sueña, sueña
mucho que los sueños de tanto soñarlos se vuelven realidad…
DIA 3
…Nos amaneció un día radiante, ni señas
de los negros nubarrones que nos habían atosigado un día antes en el Paso, TX…
desayunamos, platicamos y nos dispusimos a partir hacia el lugar acordado… con
cuarenta minutos de retrazo, hijo’esu por cinco minutejos y la cosa terminaba
mal… apareció la Abue seguida por su séquito formado por su hija, nietos,
maridos, novias y bisnietos era un filononón amén de los que ahí aguardábamos
ya, solo había faltado el hijo de la abuela que pasa a ser el hermano de mi
madre y por lo tanto nuestro tío ¿por qué no iría? ¡who knows!… nos abrazamos
los que no nos habíamos abrazado y pasamos al restaurante, disfrutamos de una
buena mariscada… el lugar era agradable había una gran fuente a cuyo lado nos
asignaron la mesa vestida de verde bandera, no pudieron haber escogido mejor
lugar… comimos, platicamos y tomamos fotos… la hija de la abuela que pasó a ser
la hermana de mamá y por lo tanto nuestra tía, desde que la recuerdo siempre
tuvo tema de conversación, supongo que heredó la parlanchinería del abuelo,
tenía plática para rato, le gusta viajar, tenemos algo en común, así es que ya
sabrá usté de lo que escribo… y volví a darme cuenta de que nada me gusta más
que viajar aunque sea a través de los ojos de otros… el tiempo pasó volando y
llegó la hora de la despedida… la abuelita volvió a escudarse en su caparazón
de mujer fuerte y de hierro, pero sus ojos la delataron y supe de sus sentimientos
más secretos y mejor guardados, ojalá y no los hubiera guardado tanto… ahora
eso era suficiente… parecía decir… ojos que te vieron ir quien sabe si te verán
volver… uy uy uy cómo duele esa frase… entre abrazos nos dijimos adiós,
esperando volver a vernos algún día no muy lejano… partimos hacia el aeropuerto
y ahí nos llegó la hora de la despedida… pasamos la aduana y a la exgorda con
la jumbo maleta que traía la volvieron a revisar… ja ja ja… ah, como hicieron
bulto esos 50 dolarucos… llegó la hora de ponernos el caparazón de mujeres
fuertes y decir adiós… un nudo se hizo en mi garganta mientras en mi corazón
llovía, llovía con gran fuerza… la pequeña estrellita estaba quieta y sus
ojitos llenos de luz no sonreían… pórtate bien pequeña estrellita de ojitos
vivarachos y pelito de sirena, y nunca dejes de soñar!!!... el pájaro de acero
levantó el vuelo y poco a poco dejamos atrás a esa ciudad que nunca debió haber
existido… el Abuelo me había dado ese último regalo… volver a ver a mi hermana,
a la pequeña estrellita de ojos vivarachos y pelito de sirena, a la Abuelita y
por sobre todo volver a vivir como si fuera ayer esa metamorfosis que mamá
sufría cuando estaba con la abuela… ese había sido su regalo, su gran regalo…
¡va por ti Abuelo, donde quiera que te encuentres!!!
Enero 30, 2007